Continúo con mi fijación por el genero de terror-comedia, disfrutando de una película que me pasó completamente inadvertida el año pasado: La cabaña en el bosque. Reconozco que me ha pillado completamente con el pie cambiado, ya que me esperaba algo más convencional. Que nadie se deje engañar por la sinopsis: esta película se parece a pocas cosas que se hayan hecho... y a la vez a muchas. Una gamberrada de proporciones épicas. Un regalo dirigido a todos los fans del género. Una colección de clichés desternillante. Esas son algunas de las definiciones que acepta esta película que tampoco esta falta de sus dosis de terror, aunque hay que reconocer que la tensión, necesaria en este tipo de películas, se diluye según discurre la historia, dando paso a una historia más fantástica que de terror, aunque eso si, con sus litros y kilos de sangre y casquería.
Joss Whedon (Star Trek (2009), Dr. Horrible). Tenía que ser él. Coguionista de esta pieza única, imprime a cada linea de la historia esa locura creativa que le caracteriza. Creatividad que se materializa en diversión a raudales y deja con ganas de más. Una película que se ríe de si misma, y de todo el género, pero que a la vez lo homenajea en lo que resulta ser un tour de force de criaturas sobrenaturales.
No desvelaré nada más. Solo añadiré que es IMPRESCINDIBLE para los amantes del género, y recomendable en general. Lo que aun no se es como se me pasó en el cine. Por fortuna, he podido enmendar el error.
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